La acelga puede sembrase durante todo el año, pero suele cultivarse en otoño-invierno porque prefiere ambientes frescos y con calor se espiga pronto.
Se siembra la semilla directamente en el suelo, pero también podemos hacer semilleros si tenemos un clima demasiado frío. Las raíces crecen mucho por lo que es bueno asociarla con otras plantas de raíces más pequeñas (Por ejemplo, el ajo).
Pasados 30-40 días después de la siembra podremos comer las primeras hojas. Para que nos dure más el cultivo, consumiremos poco a poco las hojas sin arrancar la planta entera.